domingo, 10 de abril de 2011

Swap

Antes que nada,¡la definición de Swap!

Un swap es un contrato entre dos partes para intercambiar flujos de caja en el futuro.

Es decir, es un contrato financiero entre dos partes que acuerdan intercambiar flujos de caja futuros de acuerdo a una fórmula preestablecida.

Se trata de contratos hechos "a medida" (con el objetivo de satisfacer necesidades específicas de quienes firman ese contrato). Es decir son OTC (Over The Counter o Sobre el Mostrador), es decir, hechos a la medida. Pero, siempre incurren en cierto nivel de riesgo crediticio propiciado por su operación.

Los swaps son utilizados para reducir o mitigar los riesgos de tasas de interés, riesgo sobre el  tipo de cambio y en algunos casos son utilizados para reducir el riesgo de crédito.

Especifiquemos más... 

La mayoría de las coberturas se diseñan para compensar el riesgo asociado con una volatilidad en el precio a la que están expuestos un productor, un consumidor o un inversionista. Mediante su entrada en un swap o en alguna otra forma de instrumento derivado, una parte puede cubrir el riesgo asociada a las fluctuaciones en un precio bajo el supuesto de que la cantidad es conocida. 

La eficiencia de la utilización de un swap cualquiera que sea su uso, dependerá de conocimiento del mercado global de capitales y la eficiencia del mercado en la que estamos participando. El elegir un buen agente o corredor también es de suma importancia, ya que será el responsable de que el rendimiento de nuestro capital sea positivo. 

El swap es un instrumento que puede ser de gran ayuda dentro de planes contingentes en la empresa, para proteger de sucesos inesperados, solo si sabemos emplear éstos instrumentos, sacaremos provecho de ellos. 

A diferencia de los forwards, que son contratos que terminan en una fecha en particular, los swaps podrán emplearse para coberturas calendarizadas, que pueden proteger a un negocio de ciertos fenómenos cíclicos de la misma macroeconomía.

Respecto de su configuración, los contratos de swap contienen especificaciones sobre las monedas en que se harán los intercambios de flujos, las tasas de interés aplicables, así como una definición de las fechas en las que se hará cada intercambio y la fórmula que se utilizará para ese efecto.

El tipo de swap más común es el de tasas de interés, mediante el cual se intercambian flujos de intereses en una misma moneda en ciertas fechas previamente convenidas: 

1- Una parte paga flujos de intereses aplicando una tasa de interés fija sobre un cierto monto nocional y recibe flujos de intereses aplicando una tasa fluctuante sobre ese mismo monto nocional. 

2- La contraparte recibe los intereses calculados de acuerdo a la tasa  fija y paga los intereses a  la tasa fluctuante, sobre el mismo monto y en las mismas fechas. 

Típicamente, este tipo de swap se utiliza para transformar flujos de caja a tasa fija en flujos de caja a tasa fluctuante o viceversa.

Un swap de moneda extranjera opera de manera similar, sólo que el intercambio de flujos se hace en función del tipo de cambio de dos monedas y, en la estructura básica, la tasa de interés que entra en la fórmula de cálculo es fija para ambas partes.
  

Y un ejemplo:

"Ejemplo de un swap de divisas realizado entre IBM y el Banco Mundial en 1981: 

IBM convirtió a dólares unas emisiones anteriores de deuda en francos suizos y marcos alemanes de IBM. 
El swap permitió a IBM aprovecharse del aumento del dólar a principios de los años 80 y fijar el tipo de cambio al que repagar su deuda. 
Por su parte el Banco Mundial emitió bonos en dólares que le proporcionaron los dólares necesarios para el swap, y consiguió a cambio financiamiento en francos suizos y marcos".

¿CÓMO SE CLASIFICA EL SWAP? 

1. Swaps sobre tasas de interés

Como ya hemos mencionado antes, suele ser el más habitual. Es un contrato por el cual una parte de la transacción se compromete a pagar a la otra parte una tasa de interés fijada por adelantado sobre un nominal también fijado por adelantado, y la segunda parte se compromete a pagar a la primera a una tasa de interés variable sobre el mismo nominal.

Los contratos swaps de tipos de interés son permutas de carácter financiero en las que se intercambian obligaciones de pago, correspondientes a préstamos de carácter diferente, referidas a un determinado valor nocional en una misma moneda. Normalmente se intercambian intereses fijos por variables, aunque también se pueden intercambiar intereses a tipo variable sobre dos bases de referencia distintas.

Es decir un swap no es un préstamo, ya que es un intercambio de flujos de tasas de interés y nadie presta el nominal a nadie, es decir, las cantidades de principal no se intercambian.

1.1 Swaps de divisas

Es una variante del swap de tipo de interés, en que el nominal sobre el que se paga el tipo de interés fijo y el nominal sobre el que se paga el tipo de interés variable son de dos monedas distintas. 
La forma tradicional del swap de tipo de cambio, generalmente denota una combinación de una compra (venta) en el mercado al contado "spot" y una venta (compra) compensatoria para la misma parte en el mercado a plazo "forward", pero este puede a veces referirse a transacciones compensatorias a diferentes vencimientos o combinaciones de ambos.

Un swap de divisas es un acuerdo entre dos agentes económicos para intercambiar, durante un período de tiempo acordado, dos flujos de intereses nominados en diferente moneda y generalmente, al vencimiento del acuerdo, el principal de la operación, a un tipo de cambio determinado al inicio de la misma, normalmente el de contado para dicho día.
Dicho intercambio de principales es el que, precisamente, nos permite cubrirnos de la evolución desfavorable de los tipos de cambio.
Respecto a las clases más simples de swaps de divisas existentes, variarán en función de los tipos intercambiados, distinguiéndose entre:
  • Swap de divisas fijo contra variable.
  • Swap de divisas variable contra variable.
  • Swap de divisas fijo contra fijo.
Entre las ventajas de los contratos swaps, cabe destacar:
- la no existencia de riesgo por el principal del contrato, ya que su posible incumplimiento sólo afecta al diferencial de tipos o precios
- o el cambio en la estructura de endeudamiento que proporcionan los swaps de tipos de interés.

En cuanto a sus inconvenientes, hay que resaltar:
- lo elevado de sus principales nocionales, 
- los altos costes de intermediación e implementación 
- la dificultad en deshacer la operación antes de su vencimiento, al no encontrarse una contraparte que asuma las condiciones específicas del contrato en cuestión.

2. Swaps de materias primas (Commodity Swaps)

Un problema clásico en materia de finanzas es el financiamiento de los productores a través de materias primas, ya que los mercados mundiales de materias primas son muchas veces de alta volatilidad.

Por ejemplo, los precios internacionales del petróleo en unos cuantos días pueden bajar hasta un 30%.
Por esta razón las empresas productoras de materias primas son en general empresas de alto riesgo, tanto para préstamos como para inversiones.

Por lo tanto, este tipo de swaps están diseñados para eliminar el riesgo de precio y de esta manera conseguir el abaratamiento de los costos de financiamiento.

El funcionamiento de un swap de materias primas, es muy similar al de un swap de tasa de interés, por ejemplo: un swap a tres años sobre petróleo; esta transacción es un intercambio de dinero basado en el precio del petróleo (A no entrega a B petróleo en ningún momento), por lo tanto el swap se encarga de compensar cualquier diferencia existente entre el precio variable de mercado y el precio fijo establecido mediante el swap. Es decir, si el precio del petróleo baja por debajo del precio establecido, B paga a A la diferencia, y si sube, A paga a B la diferencia.

3. Swaps de índices bursátiles

Estos permiten intercambiar el rendimiento del mercado de dinero, por el rendimiento de un mercado bursátil. 
Este rendimiento bursátil, se refiere a la suma de dividendos recibidos, ganancias y/o pérdidas de capital. 

Ejemplo sobre un nominal de USD 100 MM: "Al principio del swap se anota el valor inicial del índice en cuestión por ejemplo, el valor del S&P 500 al principio del periodo podría ser 410,00. Cada trimestre A paga a B LIBOR a tres meses en dólares sobre USD 100 MM. A su vez B paga a A cada trimestre una cantidad de dinero igual a los dividendos que A habría recibido de haber invertido USD 100 MM en las acciones que componen el S&P 500, estando el índice a su valor inicial de 410,00 en el momento de la inversión.

Además de lo anterior, si el índice S&P 500 está por encima de su valor inicial al final del primer trimestre, B pagará a A la diferencia sobre una cantidad de acciones correspondientes a la inversión inicial de USD 100 MM con el índice a 410,00, y si está por debajo A pagará a B la diferencia. Este proceso se repite cada trimestre, tomando siempre el cierre del trimestre anterior como diferencia pero manteniendo el número de acciones definido al principio de la transacción siempre fija".

A través de este mecanismo, se consigue la misma rentabilidad de haber invertido en acciones y se financia a su vez, pero siempre conservando su capital, y esto le permite invertirlo en otros activos.

4. Swaps sobre tipo de cambio

En este tipo de contrato una parte se compromete a liquidar intereses sobre cierta cantidad de principal en una divisa. Por el otro lado, recibe intereses sobre cierta cantidad de principal en otra divisa.

Esta es una variante del swap de tasa de interés, en el que el nominal sobre el que se paga la tasa de interés fija y el nominal sobre el que se paga la tasa de interés variable son en dos monedas distintas.
A diferencia del swap sobre tasa de interés, en este, las cantidades de principal se intercambian al principio y final de la vida del swap.
Este a su vez puede utilizarse para transformar un préstamo en una divisa en un préstamo en otra divisa. Ya que se puede afirmar que un swap es una posición larga en una obligación combinada con una posición corta en otra obligación. Un swap puede ser considerado como una cartera de contratos a plazo.
Por ejemplo, en la actualidad las instituciones financieras reciben con frecuencia como depósito un swap.

5. Swaps crediticios

Sirven para administrar el riesgo sobre el crédito a través de la medición y determinación del precio de cada uno de los subyacentes (tasa de interés, plazo, moneda y crédito).
Estos riesgos pueden ser transferidos a un tenedor de manera más eficaz, permitiendo así, un acceso al crédito con un menor costo. Ajustándose a la relación entre oferta y demanda de crédito.
Se podría afirmar que el riesgo crediticio, no es otra cosa más que, un riesgo de incumplimiento posible.

Existen dos opciones de swaps: 

- el swap de incumplimiento (default swap):

En un contrato de swap de incumplimiento, un vendedor de riesgo crediticio paga a otra parte por el derecho de recibir un pago en el caso de que se produjera el cambio acordado entre ellos en el estatus crediticio del crédito de referencia, usualmente un título corporativo. 
 
- el swap de retorno total (total return swap).

Los swaps de retorno total, por el contrario, permiten que el vendedor del riesgo crediticio retenga el activo y reciba un retorno que fluctúa a medida que se modifica el riesgo crediticio. El vendedor paga unas tasas total de retorno sobre un activo de referencia, en general un título que incluye cualquier consideración de precio, a cambio de pagos periódicos a tasa flotante más cualquier reducción de precios.

Cuando se inventaron este tipo de swaps, usualmente eran utilizados sólo por los bancos, para proteger los créditos bancarios.
En la actualidad se han vuelto instrumentos de cobertura muy popular ya que permiten retener el activo y a su vez segmentar y distribuir el riesgo.
Esto permite que un banco pueda liberar líneas de crédito y continuar prestando dinero a sus clientes, aun cuando exceda sus límites de exposición para dicha empresa o industria, mediante la descarga del riesgo crediticio (en todo o en parte) a través de un swap de retorno total o de incumplimiento.
Además, puede concentrarse en préstamos a los sectores donde posee mayor presencia o experiencia, sin preocuparse por la concentración de riesgo excesiva. Los bancos más pequeños, cuyos márgenes se ven reducidos por el alto costo del dinero, podrían obtener un retorno mayor y una exposición a créditos mejores utilizando derivados crediticios y no préstamos directos.

También pueden presentar los siguientes RIESGOS

  • Riesgo diferencial:
    Si se cubre un swap con un bono, y se presenta un cambio en el diferencial del swap con respecto al bono se puede ocasionar una pérdida o una utilidad
    en la rentabilidad del swap.
  • Riesgo de base:
    Cuando se cubre un swap con un contrato a futuro y existe una diferencia entre la tasa de referencia y la tasa implícita en el contrato a futuro, originando una pérdida o una utilidad.
  • Riesgo de crédito:
    Probabilidad de que la contraparte no cumpla con sus obligaciones.
  • Riesgo de reinversión:
    Es derivado del riesgo de crédito, cuando hay cambios en las fachas de pago, es necesario reinvertir en cada fecha de rotación.
  • Riesgo de tipo de cambio o cambiario:
    Si se produce una fluctuación positiva de las monedas que se va a liquidar cuando se realice la transacción (compra o venta), es decir, si al final de la operación comercial tienen que pagar más de su propia moneda (o cualquier otra) para adquiri la misma cantidad de la divisa que se acordó en el contrato. Lo que afecta el costo final de las transacciones.

    Orígenes de los MERCADOS de swaps


    Un tipo de cambio (extranjero) es el número de unidades de una moneda que se puede comprar a cambio de una unidad de otra moneda. Estos tipos de cambio llegaron a ser extremadamente volátiles a principios de la década de los años setenta.Un tipo de cambio (extranjero) es el número de unidades de una moneda que se puede comprar a cambio de una unidad de otra moneda. Estos tipos de cambio llegaron a ser extremadamente volátiles a principios de la década de los años setenta. El incremento drástico en la volatilidad del tipo de cambio creó un ambiente ideal para la proliferación de un documento parecido al swap que pudiese ser utilizado por multinacionales para cubrir operaciones de divisas a largo plazo.
    Los swaps eran una extensión natural de los préstamos llamados paralelos, o back-to back, que tuvieron su origen en le Reino Unido como medios para evitar la rigidez del cambio de divisas, que buscaba, a su vez, prevenir una salida de capital británico. Durante los años setenta, el gobierno británico gravó con impuestos las transacciones en divisas, incluyendo a su propia moneda. La intención era encarecer la salida de capital, creyendo que esto alentaría la inversión doméstica haciendo que la inversión en el exterior fuese menos atractiva.
    El préstamo paralelo llegó a ser un vehículo ampliamente aceptado por medio del cual podía evitar estos impuestos. El préstamo back-to-back era una modificación sencilla del préstamo paralelo, y el swap de divisas fue una extensión del préstamo back-to-back.
    El tipo de préstamo anterior involucra a dos corporaciones domiciliadas en dos diferentes países. Una firma acuerda solicitar fondos en sus mercado doméstico y los presta a la otra firma. La segunda firma, a cambio, solicita fondos en mercado doméstico y los presta a la primera. Mediante este sencillo acuerdo, cada firma está en posibilidad de tener acceso a mercados de capital en un país diferente al suyo sin algún intercambio en los mercados de divisas. Los préstamos paralelos funcionan de manera similar, pero involucran a cuatro firmas.
    Los flujos de efectivo de los swaps iniciales de divisas eran idénticos a aquellos asociados con los préstamos back-to-back. Por esta razón, los swaps iniciales de divisas a menudo fueron llamados intercambio de préstamos. Sin embargo, y contrario a lo que sucede con los acuerdos que caracterizan los préstamos back-to-back y paralelos, los swaps involucran un acuerdo sencillo.
    Dicho acuerdo especifica todos los flujos de efectivo y estipula que la primera contraparte puede quedar relevada de sus obligaciones de la segunda, si ésta no cumple con sus obligaciones con la primera. Por lo
    tanto, los swaps proporcionan la solución al problema de los derechos de establecimiento.
    Es importante hacer notar que relevar a una contraparte de sus obligaciones después del incumplimiento de la otra contraparte no significa, y de ninguna manera previene, que la contraparte que no cumplió con sus obligaciones esté en libertad de hacer cargos por daños a la contraparte incumplida.
    El otro problema asociado con los préstamos paralelos y back-to-back se solucionó a través de la intervención de corredores de swaps y de generadores de mercado que vieron el potencial de esta nueva técnica de financiamiento.
    El primer swap de divisas se cree que fue suscrito en Londres en 1979. Sin embargo, el verdadero swap inicial de divisas, el que llegó al incipiente mercado de swaps de divisas, involucró al Banco Mundial y a IBM como contrapartes. El contrato permitió al Banco Mundial obtener francos suizos y marcos alemanes para financiar sus operaciones en Suiza y Alemania del oeste, sin necesidad de tener que ir directamente a estos mercados de capital.
    Aunque los swaps se originaron a partir de un esfuerzo por controlar el intercambio de divisas, no fue sino mucho tiempo después que se reconocieron los beneficios de reducción de costos de y de manejo de riesgos que significaban tales instrumentos. A partir de este momento, el mercado creció rápidamente.

Ejemplo de valoración de un swap de tipo de interés para terminar...


El 7 de abril de 1992 un operador entra en un swap de dos años de 100 millones de dólares con un cliente. El operador recibe un tipo anual de 5,66 % y paga el LIBOR semianual. El LIBOR está inicialmente a 5,47 %. En la tabla mostramos cuales son los tipos de interés vigentes

Lo primero que hacemos es crear una tabla con el calendario de pagos. La cantidad fija se calcula multiplicando el nocional por el tipo de interés y los días transcurridos normalizándolo a 360 días:
100.000.000 · 365 · 0,0566 ð 360 = 5.738.611
El interés pagado por la parte variable se hacen de la misma manera:
100.000.000 · .0547 · 183 ð 360 = 2.780.583 




Aplicando lo comentado  en la tabla 1 se suma a los intereses el nominal nocional.
Calculamos el tipo actuarial de la manera siguiente: 

Por ejemplo; el tipo a un mes es de 5,375. 

El tipo actuarial a un año se normaliza de esta manera:
0,05662 = (1,0549 x 365 ð 360)
El de dos años se haría así:
0,059313 = (1,0585 x 365 ð 360)
Y el de tres años:
0,060732 = (0,0599 x 365 ð 360)









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